Harry Kpoh, supervisor de Logística y Distribución Global de UPS en Louisville, huyó de los estragos de la guerra civil liberiana y llegó a EE. UU. en 2003. Aprender a desenvolverse en una nueva sociedad no fue fácil.
“Cuando llegas de un país en vías de desarrollo a uno ya desarrollado, la presión por integrarte puede ser abrumadora”, dijo Harry.
Así que decidió ayudar a otros a navegar esa misma experiencia. Harry se unió a otros liberianos para fundar la Comunidad Liberiana de Kentucky y el Sur de Indiana. El grupo trabajó con funcionarios estatales para ayudar a los recién llegados de Liberia a integrarse a la sociedad estadounidense, ayudándoles a superar la barrera del idioma, a adaptarse a un nuevo entorno y a conseguir trabajo.
La situación en Liberia se estabilizó alrededor del 2007. Estaban llegando menos liberianos a EE. UU., por lo que Harry cambió su enfoque para cofundar un evento llamado Festival de la Herencia Africana.
“Representó un puente para reunir las comunidades africanas y afroamericanas a través de la cultura, la música y la narración”, dijo.
Fue a través de su trabajo en el Festival de la Herencia Africana que conoció al alcalde de Louisville, quien le pidió a Harry que participara en el Comité de Servicios Globales de Louisville, que apoya a la enorme comunidad internacional en Louisville.
“Y eso abrió la puerta para intentar retribuir a Liberia”, dijo.
Harry fundó la organización sin fines de lucro Trembo National Association of Americas, Inc. para hacer frente a la necesidad crítica de suministros médicos en Liberia. Trabaja con el equipo de salud de Liberia para averiguar cuáles son las necesidades más urgentes, y luego se reúne con organizaciones que pueden ayudar. Las organizaciones donan o consiguen artículos esenciales, como camas de hospital, máquinas de rayos X, medicamentos, máquinas de anestesia, alimentos ricos en proteínas y más.
Trabaja con su equipo para coordinar la logística de todos los suministros que consiguen, colaborando con el gobierno liberiano para asegurar que el contenedor se entregue libre de impuestos y que los suministros se distribuyan de forma justa. En su viaje más reciente, Harry logró transportar $250 000 USD de suministros médicos y de soporte vital, que acabaron beneficiando a unos 8000 residentes.
Describió la diferencia que pueden representar los suministros.
“Una de las clínicas tenía cuatro salas. Las camas consistían en un perímetro de ladrillos rellenos de hojas y recubiertos de ropa”, dijo. “Había un solo portasueros para toda la instalación. Se le asignó el portasueros al paciente más crítico. Pero cuando llegó un paciente aún más crítico, se le asignó a este el portasueros. Cuando más de una persona necesitaba una vía intravenosa, ataron el goteo al techo. Le suministramos a esa clínica nuevas camas de hospital y siete portasueros, lo que fue suficiente para todas las habitaciones y tres refuerzos”.
Liberia también está empezando a construir centros de maternidad adonde una mujer con más de siete meses de embarazo puede llegar para ser atendida y alimentada hasta el día del parto.
“La esperanza de vida de una mujer embarazada en las zonas rurales de Liberia es corta”, dijo Harry.
Su organización identificó cinco hogares de maternidad y los está abasteciendo de camas, alimentos y otros suministros.
Harry dijo que en su próximo viaje planea empezar a suministrar más alimentos, ropa, tenis, mochilas y herramientas agrícolas. Ya adquirió 4000 pares de tenis.
“Cuando la gente se entera de que estamos distribuyendo alimentos, son capaces de lanzarse a caminar 32 kilómetros para conseguirla”, dijo Harry. “Normalmente llegan descalzos y con ropa desgarrada. Es fuerte. Nadie debería tener que vivir así”.
Harry trabaja todo el año recaudando donaciones y fondos para cubrir los gastos de envío y de viaje. Además, ya está planificando la logística del próximo viaje.
Trabaja en un ciclo de dos años: recaba suministros, planifica durante un año y hace el viaje al año siguiente. Todo mientras planifica, recauda fondos y organiza para su organización. Es mucho trabajo. Pero él no consideraría no entregarse por completo.
“Tengo que hacerlo porque la necesidad está ahí”, dijo. “Brindamos una esperanza.”
“Cuando llegas de un país en vías de desarrollo a uno ya desarrollado, la presión por integrarte puede ser abrumadora”.