Durante los últimos cinco años, Paulo Mota ha entregado paquetes a los clientes de UPS, normalmente en una pequeña furgoneta de reparto.
Pero este hombre de 46 años también tiene permiso de conducción y experiencia en conducir grandes camiones. Dada su experiencia y trayectoria, fue seleccionado para hacer entregas de vacunas contra la COVID-19. Con la llegada de los suministros sanitarios críticos en un avión 767 de UPS a Sao Paulo en abril, estuvo al volante durante la entrega del primer millón de dosis en Brasil.
“Escoltado por la policía federal brasileña y conduciendo por las calles de mi propia ciudad, reflexioné sobre cómo en ese momento formaba parte de la historia”, expresó.
Paulo dice que esta ha sido la entrega más importante de su vida. La pandemia ha sido devastadora, y al borde de una tercera ola de infecciones, estas vacunas trajeron alivio y esperanza al pueblo de Brasil.
“He perdido amigos por la COVID”, dijo Paulo, que es esposo, padre y abuelo. “Han sido tiempos muy difíciles, y repartir estas vacunas con mis propias manos, y en mi camión de UPS, me llena de orgullo y esperanza. Cuando escucho las noticias sobre la entrega de vacunas, me parece que estoy escuchando mi nombre”.
Paulo y su familia se cuidan y están esperando su turno para vacunarse.
“Al igual que muchos otros en mi país, espero un mañana mejor”, dijo. “Sé que estas vacunas marcarán la diferencia en las vidas de muchos. Me siento orgulloso, no solo por mí, sino también por mi familia… y por quienes ya no están entre nosotros”.
Hasta la fecha, UPS ha entregado más de 300 millones de dosis de COVID-19 en todo el mundo, con una puntualidad del 99,9 %. Ese es otro ejemplo de cómo hacemos avanzar nuestro mundo mediante la entrega de que realmente importa.